Hablamos mucho de entrevistas de trabajo. La información sobre cómo presentarse, cómo gestionar las emociones, cómo responder inteligentemente a preguntas modelo, inteligentes o (incorrectas), cómo convencer, cómo… es incontable y se puede encontrar infinitamente en nuestros tiempos.
Sin embargo, me encontré acercándome a este tema también. 🙂
Sí, y de una manera ligeramente diferente, digo.
O al menos eso espero, proponiendo cambiar las palabras y, por tanto, la perspectiva, eso espero.
Por eso propongo que quienes se preparen intensamente lo hagan la entrevista de compromiso en lugar del famoso entrevista de trabajo.
Por la sencilla razón de que el compromiso es de ellos, mientras que la contratación (ellos) la realiza otra persona.
Un pequeño cambio de perspectiva, responsabilidad y confiabilidad, me atrevo a decir.
En la entrevista de compromiso se trata de lo que aporto al juegoque tomo como mi aporte.
Se trata del hecho de que estoy en el trabajo, jugaré (también), dependiendo de cómo saque cuando sea mi turno.
- Y seguramente llegará mi turno.
- Por lo tanto, el servicio también está conmigo.
- Durante la entrevista de trabajo ya no estoy en el trabajo, ya no tengo servidor.
- Soy más el destinatario, soy un «reaccionante».
O quiero comprometerme a ser un catalizador y acelerar las reacciones que conducirán al éxito deseado de la persona contra quien asumo este rol.
Porque quiero ser parte de este éxito, mi éxito es nuestro éxito.
“Me contrataron” suena simplista y a menudo superficial: me utilizan para recibir una suma de dinero, un paquete de beneficios, una promesa bien formulada…
«He asumido mi compromiso» se trata de contribución, proactividad, iniciativa, mantener el interés más allá del beneficio económico y su estabilidad en el tiempo, ser embajador de nuestras acciones comunes.
Se trata del trabajo como vehículo de bienestar.
Porque me he comprometido con alguien que respeta que mi desarrollo requiere valentía, y esto inevitablemente lleva a momentos de obstáculos que son igualmente experiencias de aprendizaje; hacia alguien dispuesto a respetar mi evolución como persona y como profesional, hacia alguien dispuesto a darme confianza y espacio para desarrollarme.
Por lo tanto, en preparación para la entrevista de compromiso, para lograr la máxima eficiencia, siempre revisaré mis baterías con anticipación:
– esos chicos VVM: visión personal, misión personal, valores personales;
– esos chicos aaa: habilidades cultivadas, actitud de acercamiento, altitud objetivo;
– esos chicos AAA+: compromiso, asunción, acción.
Porque lo que busco es una asociación donde vengo con un compromiso.
Y en definitiva, no sólo en determinados días del mes, sino que al final de cada día dedicado al compromiso, cada uno vuelve a sí mismo y a sus seres queridos.
Entrevista de trabajo versus entrevista de compromiso
Las entrevistas de trabajo y las entrevistas de compromiso son dos tipos distintos de conversaciones formales, aunque comparten algunas similitudes en cuanto a su estructura y propósito. A continuación, te explico las diferencias clave entre ambas:
Entrevista de Trabajo
Propósito:
- Evaluación profesional: El principal objetivo es evaluar las habilidades, experiencias, y aptitudes del candidato para determinar si es adecuado para un puesto de trabajo específico.
- Selección de candidatos: Es parte del proceso de selección en una organización, donde los empleadores buscan al mejor candidato para cubrir una vacante.
Contexto:
- Entorno profesional: Se lleva a cabo en un entorno laboral, ya sea en la oficina de la empresa, de manera virtual, o en un lugar neutral.
- Formalidad: Generalmente, es una conversación formal donde el candidato se presenta de manera profesional.
Contenido:
- Preguntas técnicas y de comportamiento: Los entrevistadores suelen hacer preguntas relacionadas con las habilidades técnicas, experiencias previas, y cómo el candidato maneja situaciones específicas en el trabajo.
- Expectativas laborales: También se discuten temas como las expectativas salariales, beneficios, y la cultura de la empresa.
Entrevista de Compromiso
Propósito:
- Evaluación de intenciones: El objetivo principal es discutir y evaluar la seriedad y el compromiso de las partes involucradas en un proyecto, relación o acuerdo.
- Formalización de acuerdos: A menudo, se utiliza para formalizar compromisos, como en relaciones comerciales, asociaciones, o incluso en procesos de negociación matrimonial en algunas culturas.